El problema de las rampas peatonales se repite en todo el distrito.
Mal ubicadas, pendientes muy inclinadas, anchos inadecuados, mobiliario que estorba, como la rampa ubicada en la esquina de la calle 2 de Mayo y la avenida La Mar, donde unposte de alumbrado y un tubo inclinado se encuentran en medio de la rampa.
Es urgente revisar una a una cada rampa miraflorina, para asegurar que vivimos en una ciudad inclusiva que respeta al peaton, al que transita en silla de ruedas entre otros vecinos.
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